El alcalde, Antonio Salazar, y Ana Molina, alcaldesa pedánea de Brácana, asisten a la reunión del Plan de Sostenibilidad Turística del Poniente Granadino ‘La última frontera de Al-Ándalus’.
Impulsado, elaborado y presentado por la Diputación de Granada en la anterior legislatura, cuenta con una financiación de 2.480.000 euros procedentes de los fondos Next Generation.
Un plan estratégico que persigue la consolidación de la Marca de Calidad Territorial “Poniente Granadino” como producto de un territorio con una identidad histórica común.
El Plan propone proyectar y ejecutar acciones de recuperación ecológica y medioambiental en ámbitos fluviales que funcionan como corredores ecológicos entre las sierras del norte y el pasillo fluvial del Genil. En cuanto a eficiencia energética, el documento plantea favorecer la electromovilidad urbana mediante la implantación en los núcleos urbanos de puntos de recarga de vehículos y bicicletas eléctricos, así como mejorar la eficiencia energética de los equipamientos turísticos públicos, tratando con ello de reducir la huella de carbono local.
También incluye propuestas relacionadas con la transición digital para hacer del Poniente un destino digitalizado, inteligente y sostenible y para impulsar las fortalezas de la comarca, entre las que destacan la existencia de un considerable patrimonio natural, histórico y cultural, así como de sectores de marcado valor estratégico: olivar, espárrago, hortícola, raza ovina lojeña, termalismo, acuicultura y actividades náuticas en embalses. Además, destaca la ubicación geográfica del Poniente, equidistante de grandes focos turísticos de interés emisor: Granada, Málaga, Córdoba, Ronda y Antequera y la existencia de una marca territorial de calidad específica del Poniente Granadino, en progresivo proceso de implantación en alojamientos, restauración y empresas agroalimentarias.
